sábado, 3 de marzo de 2012

No sé lo que daría yo, por retenerte al menos, otro instante.

Me habré cansado de esperarte, de perder a solas la razón y el cielo aquél, que tanto me gustaba regalarte. Mi vida, dime, ¿qué pasó para que todo fuera tan distante? y ¿qué pasó para que creernos que ya todo terminó?
¿Por qué no nos dijimos nada antes? El extraño soy yo, aquí, diciendo adiós. Lo que la lluvia nos enseña, lo que nadie puede escribir. Lo que se escucha cuando tiemblas, lo que te acercará hasta mí igual que entonces será siempre, lo que dejaste sigue ahí. Todos los sitios, los diciembres están donde los escondí, las cosas pierden su sentido si no me llevan hasta ti. Y no te miento cuando digo que tu mirada sigue aquí, que algunas noches me recuerdes, que no me dejes de sentir. Yo andaré cerca por si vuelves esas palabras a decir.

No hay comentarios:

Publicar un comentario